La ciudad de Madrid se ha vestido de gala para conmemorar el 20 aniversario del fatídico atentado terrorista del 11 de marzo de 2004. En este día tan emblemático, se ha inaugurado en la capital española el nuevo espacio en homenaje a las víctimas del 11M, una obra que busca recordar y honrar a los fallecidos en aquellos trágicos sucesos que cambiaron la historia de nuestro país.
Fue en la mañana del 11 de marzo de 2004 cuando Madrid se despertó conmocionada por una serie de explosiones en distintas estaciones de trenes en plena hora punta. El resultado fue devastador. Desde aquel día, Madrid no ha olvidado a las víctimas y ha mantenido vivo el recuerdo de ese doloroso episodio.
Por eso, ayer, se encendió, al atardecer, un haz de luz azul proyectado hacia el cielo para honrar a los 192 fallecidos y más de 2.000 heridos que causaron la explosión de las bombas colocadas en cuatro trenes de Cercanías de Madrid, en las estaciones de Atocha, Santa Eugenia, El Pozo, y junto a la calle Téllez. La iluminación especial se podrá ver también hoy, coincidiendo con la conmemoración del Día Europeo en Memoria de las Víctimas del Terrorismo y el XX aniversario de los atentados de 2004 en Madrid.
En este nuevo espacio, que ocupa una superficie de 2.000 metros cuadrados. En este memorial, las paredes están pintadas de color azul cobalto, el elegido por las Asociaciones de Víctimas para este entorno, y llevan grabados los nombres de los fallecidos en el atentado del 11 de marzo del 2004 de Madrid.
El objetivo de este nuevo espacio de homenaje en la estación de Atocha es ofrecer un lugar de recogimiento y recuerdo en memoria de todos los fallecidos y heridos, aprovechando un punto de la capital por el que anualmente transitan 15 millones de viajeros.