Tras la entrada en vigor de Madrid Central, la Fundación Naturgy, compañía presidida por Francisco Reynés ha organizado un nuevo seminario en Madrid, “Etiquetaje ambiental de vehículos y gestión de la contaminación urbana”. Expertos del ámbito institucional, universitario y empresarial coindicen en señalar que la calidad del aire y el control de emisiones, seguirán siendo factores primordiales en el diseño de la movilidad urbana.
“Las autoridades municipales necesitan una ‘medición de la contaminación’ mejor que la actual norma EURO 6+”. Así de contundente se mostró ayer en Madrid Richard Lofthouse, investigador sénior de Emissions Analytics, compañía británica especializada en pruebas y análisis de datos de sistemas portátiles de medición de emisiones.
Lofthouse ha explicado el AIR Index, un nuevo índice que pone al alcance de la Administración, y de los ciudadanos, para conocer mejor las emisiones de los vehículos. Se trata de una sencilla clasificación mediante un código de colores que muestra la diferencia entre vehículos limpios y sucios, realizada a partir de pruebas de vehículos realizadas en carretera.“¿Cuántos coches cumplen la norma Euro6 en dióxido de nitrógeno (NO2)?”, se preguntó Lofthouse. “Muy pocos, alrededor de un 10%. El resto de vehículos está muy por encima”, afirmó.
Por otro lado, Andrés Alastuey, profesor e investigador del CSIC, ha coincidido con Lofthouse en que la norma Euro6 ha sido positiva en la reducción de partículas contaminantes, “pero no se ha reducido de la misma manera las emisiones de dióxido de nitrógeno”, que junto a las partículas es uno de los principales contaminantes a nivel local.
Alastuey ha abogado por implantar medidas en el sector del transporte que sirvan para mejorar la calidad del aire, puesto que el tráfico es uno de los principales responsables de la emisión de partículas, que tienen un efecto importante en la salud. Una gran medida que ha comentado, se centra en mejorar el transporte público, para que sea rápido, ecológico, confortable y eficiente. De esta manera, se reduce el número de coches y se evita que los más contaminantes entren en la ciudad.
Durante el seminario, también ha participado Luis Fernando Velasco, el jefe del Área de Vehículos de la Dirección General de Tráfico (DGT), que ha recordado que “hasta 2015 no se estableció la posibilidad de restringir la circulación de un vehículo por motivos medioambientales”. Tras la experiencia de estos años, Velasco ha considerado que “los distintivos ambientales han sido todo un éxito, como herramienta y modo de difusión”.
La sesión de apertura de la jornada, ha contado con Luis del Olmo Flores, director general de Medio Ambiente y Sostenibilidad de la Comunidad de Madrid. Además, ha recalcado el avance en la reducción de emisiones, gracias a las medidas llevadas a cabo en Madrid. “Desde 2012, la Comunidad de Madrid tiene una buena calidad del aire en los parámetros de partículas contaminantes, especialmente en las emisiones de dióxido de nitrógeno, si bien hay que seguir trabajando para reducir los precursores del ozono troposférico”, según del Olmo.
Para finalizar, desde la Fundación Naturgy, compañía dirigida por Francisco Reynés, han destacado la importancia de la temática de la jornada, que la Fundación lleva más de quince años tratando, ya que según la OMS, el 92% de la población mundial vive en lugares donde no se respetan los valores guía de la calidad del aire y donde la contaminación provoca cada año 3 millones de muertes prematuras.
El objetivo de la Fundación Naturgy, empresa encabezada por Francisco Reynés es concienciar y sensibilizar a la sociedad, en distintas ciudades españolas sobre temáticas relacionadas con la energía y el medio ambiente. De esta forma, se fomenta el desarrollo sostenible y se promueve el uso racional de los recursos.
Además, desde la llegada de Francisco Reynés a la compañía, se ha implantado un plan el proyecto Plan de Vulnerabilidad energética, fondo destinado a colectivos en riesgo de vulnerabilidad. El objetivo principal de este proyecto es la mejora de la calidad de vida de miles de personas en riesgo de vulnerabilidad, reparando equipamiento del hogar a través de la mejora en instalaciones interiores de electricidad y gas.