Las obras del Bernabéu avanzan a pasos agigantados

nuevo santiago bernabeu

Las obras del Santiago Bernabéu avanzan sin interrupciones y más rápido de lo previsto debido a que existe un parón por los partidos.

La obra del campo del Real Madrid se inició en junio de 2019 con la idea de dotar al estadio de un techo retráctil, una fachada en la que poder proyectar imágenes y un videomarcador de 360 grados. En un primer momento, el proyecto de 575 millones, se planteó para que durase hasta 2022. Pero, con la ausencia de partidos en el Bernabéu, ya que el equipo juega en su segundo estadio, los ingenieros no han sufrido ninguna interrupción y la construcción avanza a pasos agigantados.

Según fuentes del club, antes de la pandemia cada partido suponía una interrupción de tres días. No solo había que parar el día del juego, sino también el anterior y el posterior, para montar y desmontar las máquinas, y asegurarse de que ningún espectador pudiese sufrir riesgos. Y es que, si se jugaba en casa un partido de Liga e inminentemente uno de Champions, el parón de la construcción podría extenderse hasta una semana. Pero, eso, ahora ya no ocurre.

Pasear por los aledaños del estadio es  ver andamios plegables de aluminio, observar torres móviles de aluminio y un gran número de grúas que hacen que los sueños de títulos de los madridistas, en el nuevo Bernabéu, estén cada vez más cerca.

Al final, el estadio del Real Madrid es un símbolo de la capital y cuando la reforma esté terminada será un atractivo turístico como lo venía siendo años atrás. Un reclamo que busca impulsar el devastado sector del turismo tras la pandemia del coronavirus.