El loco Antonelli es una taberna atípica en el centro de Madrid, un pedazo de un puerto cualquiera arrancado de su entorno natural e instalado en el corazón de la capital. Este restaurante portuario está especializado en los platos disponibles en casi cualquier puerto del mundo, pero elaborados con un toque personal.
La carta de esta taberna restaurante se caracteriza por la abundancia de mariscos cocinados en diferentes estilos internacionales, si bien destaca la gastronomía mediterránea. Al timón de este local se encuentra Sergio Mange, un chef mexicano que colabora con Rubén Lorenzo, el jefe de sala.
El establecimiento no es mucha cosa. Apenas caben 10 o 12 mesas. Se trata de un espacio pequeño ubicado en uno de los puestos del mercado La Chispería, en Chamberí, todo ello a pocos metros de la plaza Olavide. Aunque reducido, el local del restaurante, decorado por Flavia Castaño, está abierto a la luz con irisaciones blancas y azules. Cuenta con dos barras y una sala.
El nombre de la taberna se inspira en Juan Bautista Antonelli, un ingieniero italiano que en 1580 propuso a la corte de España crear un canal que conectara el río Manzanares con el océano Atlántico, de manera que pudieran navegar los barcos desde Madrid hasta el mar.
En la carta de El loco Antonelli podemos detacar los aperitivos Gilda, los dumplings de rabo de toro, las chirlas con curry de ají amarillo, la merluza con pochas navarras, el pulpo a la guanche, el adobo de ternera y, como postre, un donut pasado a la plancha, las fresas glaseadas con vermut, etc. También conviene hacer mención a la carta de vinos, propuestas para combinar de la mejor manera posible con los platos servidos.
En El loco Antonelli cada comida sale alrededor de 30 o 40 euros. Esta taberna restaurante se encuentra en la calle de Olid, 15, es decir, en el mencionado barrio de Chamberí.