Este invierno el riesgo de sufrir una gran nevada en Madrid vuelve a ser alto, el cambio climático ha hecho que estos sucesos puedan suceder de forma más común en la capital de España. Esto hace que las autoridades se tengan que preparar para este nuevo invierno.
La cantidad de maquinaria y herramientas para luchar contra la nieve aumentaran este año, se ha invertido en poder mejorar la respuesta ante una situación tan crítica como la vivida en enero de este año. La situación de hecho, provocó que se requiriesen de numerosos arreglos que costaron una gran inversión.
Los árboles fueron los que más sufrieron, en parques y calles se cayeron y rompieron ramas, lo que requirió que muchos fueran talados. Los equipos de mantenimiento de carreteras tuvieron que trabajar a destajo para reparar grietas y baches que aparecieron en los asfaltos.
En muchos pabellones y fábricas hubo que modificar el pavimento industrial, que con la humedad se habían estropeado y requerían de un nuevo suelo. Lo mismo pasó en aceras y terrazas, donde hubo que poner nuevas soleras, para ganar estabilidad.
Fueron muchas las obras y cambios que se necesitaron hacer a causa de la gran nevada, por eso con la inversión en nuevo material se quiere evitar tener que hacer unos gastos tan grandes. Además, la paralización de la ciudad provocó pérdidas para los madrileños y sus negocios, que no pudieron funcionar correctamente durante varios días.