El Museo del Prado ha organizado una exposición en torno a la pintura La última comunión de San José de Calasanz, una obra pintada por Francisco de Goya y Lucientes en 1819. Esta muestra podrá verse en dicha pinacoteca hasta el 30 de octubre de 2019.
A decir verdad, la exposición de esta obra responde a un préstamo por parte de la Orden de las Escuelas Pías de la provincia de Betania. La pintura estará en el museo hasta el próximo 30 de octubre de 2019, un año de permanencia en el Prado, concretamente en la sala 66 del edificio Villanueva. Se trata, así pues, de una cesión de un año de duración.
La última comunión de San José de Calasanz fue la última de las grandes pinturas de altar creadas por Goya a lo largo de su vida. Es un óleo sobre lienzo pintado para las Escuelas Pías de la iglesia del Colegio de San Antonio Abad de Madrid. Iba destinada al altar de la Iglesia de San Antón, contigua al colegio. Conviene recordar, al respecto, que el propio Goya estudió en las Escuelas Pías durante su niñez.
En el cuadro vemos a José de Calasanz comulgando por última vez en su vida a la edad de noventa y un años. La escena se sitúa en la iglesia de san Pantaleón en Roma. Hay señales de las pinturas negras de Goya en esta tela y un halo de devoción austera y recogida sobrevolando la atmósfera del cuadro.
Interesa apuntar también que se da una peculiar coincidencia, y es que este año se celebran los 200 años de la inauguración del Museo del Prado, siendo así que 1819 es también la fecha en que se pintó este lienzo. Así pues, La última comunión de San José de Calasanz puede verse en el Museo del Prado hasta el 30 de octubre de 2019 en la sala 66.