La Empresa Municipal de Transporte instaló 51 balizas inalámbricas con un tipo de alimentación contactless para separar el carril del autobús en Bravo Murillo.
Se trata de una prueba que la EMT realiza, una vez elegido un tipo específico de separador luminoso, y después de analizar varios modelos.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, visitó el lugar de prueba de estos balizadores junto con el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante.
Es un balizamiento led empotrado en el asfalto donde, hasta ahora, existían los separadores de ‘aleta de tiburón’.
Las balizas fueron instaladas en la calle Bravo Murillo, en el tramo comprendido entre las calles Hernani y Ávila, en sentido plaza de Castilla, unos 255 metros.
En un comunicado del Ayuntamiento de Madrid se explica que en esta prueba piloto, las balizas led están instaladas a unos cinco metros de distancia unas de otras con el fin de delimitar el carril bus, potenciando la segregación para dar prioridad al transporte público y, a la vez, evitar la impermeabilidad en estas vías.