La plaza de Tirso de Molina es conocida por sus quioscos de flores, que regresarán con el aspecto original que lucían en sus inicios, para seguir deslumbrando a los visitantes con colores y olores.
Y es que una de las identidades de la céntrica plaza son precisamente sus quioscos de flores, que próximamente lucirán rehabilitados y mejorados, pero conservando su aspecto original de hace más de diez años.
Esto gracias a las obras de mantenimiento y conservación que se están llevando a cabo en la plaza de Tirso de Molina, con un presupuesto de 87.998,79 euros, y que estarían listos a principio de 2022.
Los ocho quioscos originales volverán con sus esplender de siempre, en dos fases: primero se remozarán cuatro y sus dueños se posicionarán de los otros cuatro; para entonces cambiar a la segunda fase y remozar los restantes.
Los ocho quioscos que conforman este mercado de las flores son módulos con idénticas dimensiones, formados por una estructura metálica, con revestimiento de chapa y vidrio, envuelto en lamas de madera para adaptarlos al entorno arbóreo de la plaza.